Los profesores del siglo XXI estamos en el deber de actualizarnos constantemente en todos los temas educativos. Más aún en esta época en la que los avances tecnológicos ocurren con tanta rapidez. 

La responsabilidad que adquirimos con las niñas, niños y jóvenes de nuestro país, requiere que conozcamos diferentes modelos pedagógicos y métodos educativos.

¿Qué es un método educativo?

Un método educativo es el sistema de principios y acciones por medio de las cuales los docentes organizan la actividad práctica de su asignatura, con el fin de que los estudiantes puedan aprender e interiorizar diferentes conocimientos. A continuación te enseñaremos 3 métodos novedosos que puedes poner en práctica en tus clases. 

Flipped Classroom (Aula invertida)

Este modelo de aprendizaje ha ganado muchos adeptos en los últimos años, debido a su propuesta innovadora. Su idea principal es que los alumnos aprendan haciendo y no memorizando, como proponía el método clásico. 

El Aula invertida plantea que los alumnos deben estudiar la teoría en casa para que el tiempo de clase se dedique a la práctica de esos conocimientos. Esto permite que los estudiantes se involucren desde el primer momento en su proceso de aprendizaje y se transformen en actores, no solo en espectadores, ya que, al haber revisado las lecciones con anterioridad, llegarán al aula llenos de dudas, dispuestos a plantear preguntas y a ahondar en el tema. 

Lo anterior dinamizará la clase y el profesor tendrá más libertad para proponer distintas actividades individuales o grupales encaminadas a resolver esas inquietudes que traerán los estudiantes. 

Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP)

Esta estrategia didáctica se basa más en el saber hacer que en el conocer y nació como respuesta a los desafíos que los profesores debemos enfrentar con las nuevas generaciones digitales que llegan a nuestras aulas. Con este modelo se busca plantear un problema o pregunta de la vida real, que debe despertar el interés de los estudiantes y, en lo posible, contar con su aprobación. 

La solución del problema se debe realizar mediante un proceso de investigación o creación. Además, al finalizar la actividad, los estudiantes deben socializar su proyecto y las conclusiones a las que llegaron. 

El objetivo principal del Aprendizaje Basado en Proyectos es que los estudiantes involucren a sus familias y comunidad en sus deberes escolares. Por ello es fundamental que la pregunta que tengan que resolver sea amplia y les permita hacer uso de las nuevas tecnologías.  

Es importante que la maestra o maestro, antes de de plantear el problema, evalúe con anterioridad que todos los estudiantes tengan la misma posibilidad de acceder a herramientas idóneas para resolverlo. 

Gamificación o ludificación

Este método de enseñanza es muy innovador puesto que toma la mecánica de los juegos y la inserta en el ámbito educativo. Gracias al carácter lúdico de la gamificación, los estudiantes adquieren nuevos conocimientos de una forma más divertida, mejoran diversas habilidades mentales, vivencian el estudio de una manera más positiva y utilizan herramientas virtuales. 

La idea de esta estrategia es que el docente implemente un modelo de juego que motive a sus alumnos a superarse. Se pueden utilizar alguna de las siguientes dinámicas:

Recompensa: brindar un incentivo.

Estatus: establecerse en un nivel jerárquico de prestigio.

Logro: superar algún obstáculo o alcanzar un resultado satisfactorio.

Competición: retarse a sí mismo o a los demás a ganar.

Cooperativismo: ayuda entre los integrantes del grupo para el logro de un interés común.

Te traemos varias herramientas de gamificación que harán que tus clases estén llenas de diversión.  

¿Conoces otros métodos que quieras compartir? ¿Estás aplicando alguno de estos? Dejanoslo saber en los comentarios y recuerda suscribirte